La Paradoja del Logro
Quiero
que recuerdes ese momento. El instante cumbre. Quizás fue el día que viste esa
cifra en tu cuenta bancaria, el ascenso soñado, o cuando finalmente cruzaste la
línea de meta de ese proyecto personal que te consumió años. Lo lograste
todo. Y durante un día, quizás una semana, sentiste la euforia.
Esta es
la gran paradoja del desarrollo personal superficial que satura la web: nos
venden la idea de que el Propósito es un destino. Un punto final que,
una vez alcanzado, nos garantiza la plenitud. Pero esa es una mentira diseñada
para mantenernos en una rueda de consumo. La verdad profunda es que la




