📘 Inspirado en el libro "Sobrenatural" de Joe Dispenza
Vivimos gran parte de nuestras vidas mirando hacia atrás. Aunque el cuerpo esté en el presente, la mente muchas veces permanece anclada en recuerdos, heridas, temores o frustraciones que nos atan al pasado. Esta desconexión entre cuerpo y conciencia crea una forma de vivir en automático, en la que reaccionamos más que creamos. En su libro
"Sobrenatural", Joe Dispenza expone cómo esta fijación con el pasado genera un círculo de sufrimiento psíquico, emocional y físico que, si no se interrumpe, condiciona cada aspecto de nuestra realidad.
⚠️ El estrés crónico no es solo un estado emocional incómodo: es una programación biológica que nos mantiene en modo de supervivencia. Según Dispenza, cada vez que revivimos una experiencia dolorosa, el cuerpo responde como si esa situación estuviera ocurriendo en tiempo real. El corazón se acelera, la mente se inquieta, las hormonas del estrés —como el cortisol y la adrenalina— inundan nuestro sistema. Esto puede parecer útil a corto plazo, pero vivir así durante semanas, meses o incluso años, nos enferma. Literalmente.
🔁 Muchos de nosotros hemos aprendido a definirnos por nuestro pasado. Repetimos frases como: “yo soy así porque mi padre me dejó”, “nunca voy a confiar porque me lastimaron”, “siempre me va mal en esto”, y ese relato se vuelve un programa inconsciente que rige nuestra vida. La mente y el cuerpo entran en coherencia… pero no una positiva, sino una coherencia tóxica basada en la reiteración del trauma, el resentimiento, el miedo o la angustia. Lo que pensamos, sentimos y hacemos se vuelve repetitivo, y así la biología de nuestro cuerpo se adapta a ese estado alterado de conciencia como si fuera lo natural.
💉 Este tipo de programación es tan poderosa que crea una adicción emocional. Según explica Dispenza, nuestro cuerpo comienza a necesitar las sustancias químicas generadas por el estrés porque se ha acostumbrado a ellas. Así, incluso en ausencia de una amenaza real, buscamos inconscientemente estímulos que nos devuelvan a ese estado: conflictos, preocupaciones, problemas. Sin saberlo, nos convertimos en adictos a nuestro pasado.
🚨 El precio de esto es altísimo. A nivel físico, el estrés crónico debilita el sistema inmune, afecta la digestión, produce inflamación, altera los patrones de sueño, y puede desencadenar enfermedades autoinmunes o cardiovasculares. A nivel psíquico, nos vuelve ansiosos, irritables, depresivos. Y a nivel energético, reduce nuestra capacidad de sintonizar con el presente y con las posibilidades futuras. No podemos crear una vida diferente si seguimos vibrando en la misma frecuencia del ayer.
✨ Pero aquí viene la buena noticia: es posible romper este ciclo. El primer paso es darse cuenta de que el cuerpo se ha convertido en la mente. Cuando los pensamientos del pasado generan emociones automáticas, y esas emociones dictan nuestras acciones, ya no somos seres conscientes: somos programas que se ejecutan solos. El desafío está en recuperar el mando.
💡 Joe Dispenza propone que si queremos cambiar nuestra realidad, debemos cambiar nuestro estado de ser. Esto no es una simple frase motivacional, sino una decisión activa que requiere reentrenar el cerebro y reeducar al cuerpo. El cambio no ocurre por magia ni por deseo, sino por repetición, constancia e intención.
🧘♀️ La meditación es una de las herramientas centrales en este proceso. Al cerrar los ojos y dirigir la atención hacia el interior, interrumpimos los estímulos del entorno que refuerzan nuestra identidad pasada. Dejamos de ser los empleados, los padres, los hijos, los que sufrieron, los que luchan, y nos convertimos en conciencia pura. En ese espacio sin tiempo, sin identidad fija, sin rol, comienza la transformación. El cerebro puede empezar a desconectarse de las redes neuronales del pasado y a crear nuevas conexiones, basadas en el presente y en la posibilidad.
🎯 Dispenza insiste en la importancia de combinar intención clara con emoción elevada. Esto significa que no alcanza con querer un cambio mental: hay que sentirlo. Si deseás una vida de paz, tenés que sentir la paz ahora. Si querés abundancia, tenés que vibrar en gratitud. Esa emoción elevada genera un campo electromagnético alrededor del cuerpo que modifica literalmente lo que atraemos.
🖼️ Otra práctica valiosa es la visualización creativa. No se trata de fantasear, sino de entrenar al cuerpo a sentir que el futuro deseado ya está ocurriendo. Esto altera la química del cerebro, refuerza nuevas redes neuronales y prepara al sistema nervioso para sostener esa nueva versión de vos mismo. Al practicar esto a diario, el cuerpo empieza a liberarse de la adicción al pasado y a acostumbrarse a una nueva normalidad emocional.
🌬️ La respiración consciente también juega un rol importante. El estrés suele generar una respiración superficial y entrecortada. Aprender a respirar profundamente, activando el diafragma, regula el sistema nervioso y permite entrar en estados de calma que favorecen la neuroplasticidad. Cada respiración consciente es un acto de presencia.
🧭 Pero tal vez el paso más transformador es asumir que no somos víctimas del pasado, sino creadores del presente. Esta decisión cambia radicalmente el punto de partida. Ya no vivimos desde la herida, sino desde la posibilidad. No se trata de negar lo que pasó, sino de dejar de vivir atados a eso. Dispenza no propone una espiritualidad naïf, sino una revolución interna basada en neurociencia, epigenética y física cuántica.
🔓 Salir del estrés crónico es posible. Dejar de vivir en el pasado es posible. Crear una nueva identidad también lo es. Requiere trabajo, sí. Pero sobre todo requiere una profunda decisión: no seguir repitiendo. Porque lo que no se transforma, se repite. Y lo que se repite, se convierte en destino.
🌀 Hoy podés empezar. Cerrá los ojos. Respirá profundo. Sentí quién querés ser. No lo pienses: sentilo. Entrá en esa emoción como si ya estuviera ocurriendo. Y sostenelo. Aunque no veas resultados inmediatos, estás sembrando una nueva química en tu cuerpo, un nuevo orden en tu mente y una nueva vibración en tu campo. Estás rompiendo con el pasado. Estás creando lo desconocido.
💫 No somos el resultado de nuestras memorias. Somos el resultado de lo que elegimos hacer con ellas.
