Cuando dialogamos con alguien, discutimos, negociamos,
nos defendemos o simplemente mentimos, la manera como afecten nuestras
emociones a nuestro comportamiento determina nuestro nivel de Inteligencia
Emocional.
¿Qué es y por qué es tan importante este concepto de
inteligencia emocional?
El éxito de una persona no solo depende de su
inteligencia nata, también depende de la capacidad de interpretar y canalizar
sus emociones, e identificar las de los demás. En esto se basa la inteligencia
emocional.
A través de este artículo te enseñaremos en
qué consiste la inteligencia emocional, cómo interpretarla y desarrollarla,
además de los 13 rasgos necesarios para convertirte en un genio en el ámbito
emocional.
¿Qué es la Inteligencia Emocional?
La Inteligencia emocional (EQ o EI) es un término
creado por Daniel Goleman en su libro Inteligencia
Emocional, publicado en el año 1966, traducido a más de 30 idiomas, y el
cual se convirtió en un Best Seller en una gran cantidad de países.
En su libro, Goleman define la
Inteligencia Emocional como la capacidad de reconocer, comprender y manejar
nuestras propias emociones al igual que, comprender e influenciar las emociones
de los demás.
En términos prácticos, esto significa ser consciente
de que las emociones pueden impulsar nuestro comportamiento e influenciar a las
personas (positiva y negativamente).
También significa que debemos aprender a manejar esas
emociones, tanto las nuestras como las de los demás, especialmente cuando
estamos bajo presión y situaciones de estrés.
Entonces, ¿por qué debemos desarrollar la
Inteligencia Emocional?
Para la mayoría de las personas, la inteligencia
emocional es más importante que el coeficiente intelectual para alcanzar
el éxito en sus vidas y carreras.
Como individuos, nuestro éxito depende de nuestra
capacidad para leer las señales de las otras personas y reaccionar de manera
adecuada ante ellas.
Por lo tanto, cada uno de nosotros debe desarrollar
habilidades de inteligencia emocional necesarias para comprender mejor;
identificarse y negociar con otras personas, particularmente ahora que la
economía se ha vuelto más global.
De lo contrario, el éxito nos eludirá en
nuestras vidas y carreras.
¿Cómo se determina tu nivel de
Inteligencia Emocional?
Hay cinco factores que determinan tu nivel de
Inteligencia Emocional (EQ):
1. Conciencia: Es
conocer tus propias emociones mientras suceden, conocer sus efectos; tener
seguridad de tus capacidades y tu autoestima.
2. Autocontrol: Se
traduce como la capacidad de canalizar tus emociones, mantener tu integridad,
asumir las responsabilidades de tu desempeño, adaptarte a los cambios y estar
abierto a nuevas ideas. En esto consiste la disciplina mental.
3. Motivación: Se
trata de la constancia con tu trabajo, mantener estándares de excelencia,
poseer compromiso, iniciativa y optimismo por todo lo que haces. Para esto
podrías utilizar diferentes frases motivacionales.
4. Empatía: La
empatía engloba las capacidades de anticipar, reconocer y satisfacer las
necesidades de tus clientes; detectar lo que otros necesitan para desarrollar y
reforzar sus habilidades, cultivar oportunidades a través de personas diversas,
tener conciencia política y comprender a los demás.
5. Socialización: Las
habilidades sociales son íntegras para un óptimo EQ; estas traen consigo la
influencia que ejerzas en los demás, tu comunicación, tu capacidad de ser
un buen líder, tus capacidades en el manejo de conflictos, la colaboración y
cooperación, y de construir enlaces.
A través de esos factores se conoce el nivel
de inteligencia emocional de una persona.
Los psicólogos generalmente están de acuerdo en que,
entre los ingredientes para aprender cómo ser exitoso, el coeficiente de
inteligencia cuenta aproximadamente el 10% (como máximo el 25%); el resto
depende de todo lo demás, incluido la inteligencia emocional.
Estadísticamente, se dice que el 90% de las personas
con un alto desempeño tienen un alto nivel de este tipo de inteligencia.
«El EQ es el nivel de su capacidad para comprender a
otras personas, lo que las motiva y cómo trabajar en cooperación con ellas»,
dice Howard Gardner, un influyente teórico de Harvard.
Ahora bien, ¿qué rasgos poseen las
personas exitosas?
Aquellas personas exitosas que destacan por
su alto EQ, o nivel de inteligencia emocional, tienen capacidades y rasgos que
los diferencian de las demás personas.
Si quieres emprender, conseguir el éxito personal y profesional,
o simplemente
aprender cómo ser mejor persona, debes conocer y desarrollar
estos 15 rasgos que tienen las personas exitosas.
1. Tienen la capacidad de poner en
palabras tus emociones:
Se dice que solo un 36% de las personas logran
identificar sus emociones. Esto quiere decir que la gran mayoría no dominan
sus emociones, lo que los lleva a tomar decisiones irracionales y tomar
acciones contraproducentes.
Las personas emocionalmente inteligentes son capaces
de explicar con detalle lo que sienten; estos no se limitan a decir que se
sienten “mal”, sino que son capaces de explicar la razón de su ansiedad,
frustración o irritación.
Entre más específico seas con aquello que
estás sintiendo podrás tomar acciones concretas para remediarlo.
2. Su curiosidad se debe a su empatía:
Una de las características más importantes de la
inteligencia emocional es la empatía hacia otras personas. Entre
más empático seas, más te preocupas por el estado en el que se
encuentran las personas a tu lado.
3. No esperan el cambio, lo asumen:
Se requiere inteligencia emocional para ser flexible y
poder adaptarse a los constantes cambios. Para la gran mayoría, cualquier
oportunidad para salir de su zona de confort es sinónimo de miedo,
pánico y riesgo.
En cambio, los emocionalmente inteligentes anticipan
este cambio y buscan la manera de que este sume en su búsqueda de éxito y
felicidad.
4. Conocen lo suficiente sus debilidades y
fortalezas:
No solo se trata de entender tus emociones, sino de
identificar en qué eres bueno y en qué debes mejorar.
También se trata de entender en qué escenarios y con
qué personas puedes rendir al máximo, además de reconocer cuáles escenarios te
ayudan a ser exitoso y cuáles no.
La inteligencia emocional se trata de potencializar
tus fortalezas y evitar que tus debilidades te limiten.
5. Tienen una muy buena intuición:
Tu nivel de inteligencia (IQ), también conocida como
coeficiente intelectual, no suele ayudarte en tus habilidades sociales, y mucho
menos para leer a los demás y entender sus realidades.
No obstante, la inteligencia emocional (EQ) te permite
entender a las personas; sus motivaciones, miedos y aquellos elementos que no
son tan visibles y que tu intuición te permite sentir.
6. Ofenderse es una tarea difícil:
Cuando tienes la fortaleza mental para
entender quien eres, confías en ti y tienes una mentalidad abierta; las
críticas, opiniones y malos comentarios de los demás difícilmente te afectan.
Incluso, te ríes de tus debilidades, ya que entiendes
la diferencia entre el humor y el maltrato.
7. Sus prioridades les permiten decir no:
La gran mayoría de personas viven haciendo cosas que
no quieren. Permiten que les roben el tiempo que tenían destinado para
hacer otras más importantes, ya que les da pena quedar mal ante los demás.
O peor aún, no saben como decir no.
Según un estudio de la Universidad de
California, entre más se te dificulte decir no es más probable que experimentes
estrés, agobios y hasta depresión.
Las personas emocionalmente inteligentes no camuflan
sus “No” con frases como “no creo que pueda”, o “no estoy
seguro…”, para ellos decir no es una manera de
comprometerse con sus prioridades.
8. Crecen por encima de sus errores:
Debes tener la capacidad para aprender de tus errores
sin quedarte viviendo en ellos. La distancia que establezcas con ellos será
vital para tenerlos como referencia en tu camino hacia el éxito.
No permitas que un error tome posesión de tu vida; la
ansiedad, preocupación y decepción pueden privarte de grandes oportunidades.
Tampoco se trata de olvidarlos, ya que de esta manera terminarás cometiéndolos
de nuevo.
Los errores son tu experiencia. Tenla presente pero no
vivas con ella.
9. Sus acciones no están determinadas por
lo que puedan recibir a cambio:
Si tu motivación es lo que puedes recibir a cambio de
cada acción que tomas, vivirás decepcionado de la gran mayoría. Solo piensa en
la sensación cuando alguien te da algo que no esperabas… ¿te llevas
una buena impresión cierto?
Grandes decepciones vienen de grandes
expectativas
La fortaleza de las relaciones se basa en dar sin
esperar nada a cambio; en agregar valor como acto de bondad ya que esperas que
las personas a tu alrededor sigan creciendo.
10. No pierden su energía mental con
resentimientos:
Las emociones negativas que se producen a partir del
resentimiento te impiden ver con claridad. Malgastar tu energía mental con un
resentimiento implica estrés, el cual aumenta tu presión sanguínea y hasta
puede provocar enfermedades cardíacas.
Tener inteligencia emocional significa
que tu bienestar está por encima de cualquier resentimiento, ya que para ti es
más importante tu salud que gastar la energía del poder de tu mente lamentándote
por lo que te pudieron hacer.
11. Saben neutralizar las personas
tóxicas:
Para la mayoría, lidiar con personas tóxicas puedes
ser frustrante y hasta agotador. La diferencia con las personas con una
inteligencia emocional elevada es que estas pueden afrontar la situación
racionalmente.
Esto quiere decir que no permiten que esa negatividad
influya en sus emociones, ya que se esfuerzan por entender la perspectiva de
esa persona tóxica e identificar los intereses subyacentes.
La capacidad de tener perspectiva, de mirar más allá
de una situación en particular es esencial para incrementar tu inteligencia
emocional.
12. No buscan la perfección:
No malgastes tu tiempo buscando la perfección, esta no
existe y entre más rápido lo entiendas, menos decepciones tendrás en la vida.
Los seres humanos, inteligentes o no, nos vamos a
equivocar, esta es nuestra naturaleza. Así que, cuando tu objetivo es ser
perfecto y esperas que los demás lo sean, ten la seguridad que te vas a enfrentar
con una dura realidad.
Asume tus errores, los de los demás y aprende de
ellos. El éxito no se debe medir por la cantidad de fracasos que tiene un
humano, sino por su capacidad para recuperarse de ellos. Así es cómo ser
aprende cómo ser más inteligente en la vida.
13. Son agradecidos con lo que tienen:
Una mentalidad de agradecimiento, la cual te
permite ver lo positivo de las adversidades, los aprendizajes de los fracasos,
y la belleza en lo más simple es lo que le da sentido a tu vida.
Si no agradeces por lo que tienes, así sea cotidiano y
común, es poco probable que alcances un estado de plenitud independientemente
de cuánto consigas o ganes.
Existen estudios que demuestran que aquellas personas
que cultivan una actitud de agradecimiento experimentan una mejora en su humor,
energía y hasta en su estado físico.
Así que aprende cómo ser agradecido, allí radica
la clave para alcanzar la plenitud.



